martes, 26 de agosto de 2014

Oportunidades



Hace más de medio año que no escribo por aquí. Meses un tanto convulsos en varios sentidos, pero ya voy recuperando un poco la estabilidad. 

Hoy me apetece hablar un poco de las oportunidades, de esas cosas tan raras que aparecen cuando menos lo esperamos y que luego nos traen alegrías, y también, alguna que otra tristeza. Pero la vida es eso, reír y llorar, sentirse vivo.

Me llama mucho la atención el comprobar como, a lo largo del tiempo, siempre acabo encontrando cosas que anhelaba o necesitaba, cuando menos las espero. No hay nada que hacer, si las quiero, he de dejar a la vida y al tiempo que trabajen a su antojo, porque si yo me empeño en procurármelas, no sale bien. Y no hablo sólo de la famosa búsqueda del amor, sino de la amistad, del trabajo, de los pequeños sueños cumplidos... 

Y me pasa que me acerco a la barra de la vida y le digo: "sírvame una ración de amor", y ella me mira, me sonríe como si me compadeciera por mi ingenuidad, y me responde: "aquí tienes dos raciones de amistad, aprovéchalas".
Otras le digo: "sírvame cuarto y mitad de tranquilidad y estabilidad", y ella, con esa sonrisa que la caracteriza, me replica: "aquí tienes cuarto y mitad de cambios, aprovéchalos".

Y yo me enfado, y pido la hoja de reclamaciones, porque la mala pécora de la vida y su maligno socio, el tiempo, no me ofrecen lo que yo les pido en cada momento, ¿cómo se atreven?

Me encanta convertir casi todo en un pequeño relato, pero creo que con lo anterior nos podemos identificar muchos. Siempre he tenido la mala costumbre de no pararme a contemplar el mundo de posibilidades que esconde cada cambio que se produce en mi vida, cada persona nueva que conozco, incluso cada pequeño fracaso... porque son eso, oportunidades de hacer muchas más cosas, de vivir muchas más cosas. A ver si me aplico un poco más desde ahora y empiezo a devolverle la sonrisa y a darle las gracias a la vida cuando no me haga ni caso en la barra. 

Un abrazo pa tod@s y estad atentos a cada oportunidad que os ofrezca la vida.

4 comentarios:

  1. Madre mía, no se qué comentar, solo que me gusta tu reflexión. Un beso muy grande guapetona. Soy Raquel. por si no me recuerdas.

    ResponderEliminar
  2. woooow!!! excelente reflexión, Muchas gracias por compartirla =D

    ResponderEliminar
  3. La vida es muy descarada y a menudo nos lleva la contraria en amores, amistades e incluso en las aficiones. Como bien dices, debemos aprender de todas las vivencias que tenemos, porque se aprende, incluso de las peores. Y lo que debemos intentar es no conformarnos con la derrota, se pierden batallas, muchas veces, pero nos mantendremos firmes para no perder la guerra.
    Es muy importante querida escritora, lo que nos propones, mantener los ojos abiertos para aprovechar las oportunidades.
    Porque ¿imaginas que un día la vida nos sirve el amor que complete nuestras vidas? He oído por ahí que sucede de vez en cuando.... ;)
    Las amistades, ¡¡ ay tampoco son tan fáciles de encontrar y menos aún de mantener las que merecen la pena !! pero cuando se logran, están ahí para escuchar, reír, llorar... lo que necesitemos.
    Y hay personitas que llegan sin esperar y son un regalo maravilloso. La vida tiene eso, es una mala pécora que se burla de nosotr@s con sus quiebros. En cambio otras veces, nos sorprende gratamente.
    Igual si sonreímos mas a la vida cuando se atreve a llevarnos la contraria, lograremos alcanzar nuestras metas, los sueños que tanto deseamos.

    En cuanto a ti, muchas gracias por compartir con nosotr@s tus reflexiones y un abrazo muy grande.
    Raquel

    ResponderEliminar
  4. Precioso y tan cierto como la vida misma

    ResponderEliminar

Si has llegado hasta aquí, no lo dudes más, déjame ese comentario que está marinando en tu mente :D te estaré muy agradecida ;)